El 5 de noviembre tomamos el ferry a Gulhi, una isla cercana. Nos encontramos con Cristina y Alicia en el ferry y cuando llegamos a Gulhi nos reunimos con Irene y Lara. Pasamos el día juntos en la playa y haciendo snorkelling. La playa en la isla de Gulhi es hermosa, como las que se ven en las revistas que promocionan las Maldivas. El snorkelling es muy bonito, encontramos un grupo de 8 calamares que no querían irse.
Por la tarde fuimos a dar un paseo por la isla donde hablamos con los locales y tomamos algunas fotos. La gente en Gulhi es muy amable y cordial.
Regresamos a Maafushi en la tarde.
El 6 de noviembre fuimos a bucear. El primer lugar de buceo fue Kandooma Thila, un lugar lleno de tiburones, pargos, rayas águila, barracudas y todo lo que uno pueda imaginarse. Descendimos a 30m y con la ayuda de un cable y un gancho nos quedamos allí como en un acuario, viendo a los tiburones jugar con la corriente.
Fue increíble ver tanta vida marina a la vez, habían momentos en que no sabíamos para donde mirar; en todas partes estaba bonito y lleno de acción. Luego ascendimos a 26m y nos quedamos allí de nuevo con la ayuda del gancho para que no nos llevara la corriente. Ahí vimos las rayas águila y una escuela de pargos. La inmersión continúo a lo largo del Thila con más acción. ¡Qué hermosura de inmersión!
La segunda inmersión fue en Guraidhoo Corner. Fue también una buena inmersión, pero no puede compararse con la anterior. Vimos un arrecife de coral a 6m muy bonito y muchos peces coloridos.
El resto de la tarde lo tomamos con calma.
El 7 de noviembre vino Alicia de visita y pasamos la mañana en la playa. Fuimos a hacer snorkelling, pero el agua estaba llena de medusas … nos estaban picando tanto que nos hicieron salir del agua. Después nos fuimos a caminar por la isla.
A la 1:30 p.m. fuimos al área donde están las cría de tiburones, un lugar donde muchos tiburones bebés se refugian de los predadores, todos nadando tranquilamente muy cerca de la playa. Tenemos excelentes videos de los pequeñines.
Por la noche hicimos una inmersión de buceo nocturna. Esta fue una experiencia increíble. Los colores de los corales son completamente distintos con la luz a lo que normalmente vez en un buceo de día. La inmersión es a solo 16m de profundidad, pero nadamos una buena parte del arrecife buscando todo tipo de criaturas. Miren las fotos de la vida marina que encontramos.
El 8 de noviembre fue nuestro último día en las Maldivas. En la mañana fuimos a la playa y pasamos varias horas relajándonos. A la hora del almuerzo fuimos a la guardería de tiburones y de nuevo los tiburones bebés estaban allí pero no los encontramos.
A las 5:00 p.m. tomamos la lancha rápida al aeropuerto para nuestro vuelo al próximo destino … ¡Taiwán!
Pasamos un tiempo increíble en las Maldivas. Este país musulmán ha encontrado la manera de abrir sus puertas a “viajeros independientes”; personas que no pueden pagar los hoteles caros pero que aún desean visitar y disfrutar de un paraíso como este. Han creado una infraestructura de pequeños hoteles, casas de huéspedes, restaurantes, almacenes para deportes acuáticos y buceo adaptados a viajeros de bajo presupuesto. También crearon “bikini beach”, playas donde las mujeres pueden disfrutar del mar en bikini y no vestidas por completo. Por supuesto, es importante ser respetuoso con su cultura vistiéndose adecuadamente cuando no estas en “Bikini Beach”.